Dado que los ingredientes de los platos pueden variar mucho, lo ideal es que introduzcas todos los componentes. Con respecto a esto, no queda otra opción que preguntar por los datos nutricionales o hacer una estimación de los mismos.
Cuando sepas los ingredientes que lleva un plato, podrás crear una comida o una receta y utilizarla en el futuro (así te ahorrarás tener que volver a introducir los ingredientes una y otra vez).